Hablando de aguas

Por la ‘Calle de la Séquia’

Desde esta presa se construyó una acequia que mantenía el nivel por la orilla del barranco hasta llegar a la bajada del racholar, donde se encontraba la báscula municipal y además había un lavadero. Esta, seguía transcurriendo por la ‘Calle de la Séquia’ (de ahí su nombre) y continuaba hasta el famoso árbol ‘l´Om’ donde se construyó un abrevadero para el uso de las caballerías a la sombra de este árbol.

La acequia continuaba hasta un molino el cual era accionado con esta agua para moler el grano. Al final llegaba al barranco y lo cruzaba de orilla a orilla mediante un puente de madera y que como aun hoy se puede ver, se conservan vestigios los pilares que sostenían el dicho puente. Esta agua se aprovechaba para el riego de las huertas lindantes al barranco.

Desde al ‘Font del Garroferals’

Otra de las aguas que llegaba al barranco era la procedente de la ‘Font del Garroferals’ que tenía la peculiaridad de cruzar por el pueblo, en algunas zonas en forma de acequia descubierta.

Su recorrido pasaba por el colegio de la Virgen de Vallivana, por el lado del antiguo campo de futbol y posterior instituto, seguía por la calle de Sant Vicent (Torrent) hasta llegar a la plaza de del Ayuntamiento por donde la cruzaba, continuando hasta llegar a las huertas situadas antes del barranco por la zona de la casa de Ernesto Cabanes y alrededores.

La ‘Basa del Sifó’

Otra construcción para el aprovechamiento de las aguas para el cultivo de las huertas era la denominada ‘Basa del Sifó’, al lado de la carretera y antes del puente de la entrada al pueblo. Esta construcción era alimentada por una extracción de aguas subterráneas de uso particular por una familia local denominada ‘Lluis de mosca’ y solo se utilizaba para uso de sus fincas.

El ‘Clot de les tortugues’

Este era otro punto de abastecimiento de agua para uso agrícola. Dicho clot era alimentado hídricamente por las aguas de la ‘Font del Poll’ ubicada en la finca de Ninyerola. Esta fuente desapareció cuando la finca utilizó las aguas subterráneas para la explotación agrícola, secándose con el tiempo esta fuente y dejando seco el ‘Clot de les tortugues’.